“Me empecé a sentir mal estando sola y mi huésped me acompañó al hospital”
Hace unos días, una anfitriona que alquila una habitación de su casa en el barrio de Belgrano, nos contó que se empezó a sentir muy mal, y tuvo que ir al hospital. Su cuadro no tenía nada que ver con el virus del Covid19, tema que en éste momento nos tiene a todos en vilo, pero sí ameritaba atención médica, aunque ir a un médico en este contexto representa un riesgo y una exposición enorme que en realidad preferimos no tener.
Sumado a que muchos están haciendo cuarentena solos, y alejados de sus familiares y amigos que no pueden estar con nosotros en situaciones como esta.

Lo que nos cuenta esta anfitriona cuando nos llama – ¡que ya está bien y en su casa!– , es que su huésped brasilera, que vino a Buenos Aires para trabajar y estudiar fotografía y se está quedando en su casa hace casi 8 meses, la acompañó al hospital y fue una gran compañía durante esos momentos.
Estas historias nos conmueven, porque nos muestran que esto que hacemos muchas veces trasciende el aspecto exclusivamente económico, y los vínculos que se generan entre los huéspedes y las anfitrionas y anfitriones nos dejan anécdotas como estas y tantas otras.
Les cuento esto porque nos emociona ser parte de esta comunidad y que entre todos, podamos compartir estas experiencias, porque creemos que es algo que marca la diferencia.
Seguramente haya muchas más anécdotas e historias de este estilo, y nos encantaría conocerlas.
Contáme alguna anécdota o situación en la que recuerdes que algún huésped que se alojó en tu casa te haya acompañado o ayudado con algo.
Espero tus comentarios